El iPad (2025) llega con un chip más potente, más espacio y un precio que te hará mirar dos veces
Apple acaba de refrescar su tablet de entrada con lo que podríamos llamar una «actualización sensata». Mientras el foco estaba en los nuevos iPad Air con chip M3, la compañía no se ha olvidado de su caballo de batalla más asequible. El nuevo iPad de 11ª generación (2025) llega sin aspavientos, pero con dos mejoras clave que marcan la diferencia y, lo más importante, con una rebaja de precio que parece un guiño a la realidad económica de muchos usuarios.
Un salto generacional en el corazón y en el almacenamiento
Si buscas diferencias a simple vista, vas a tener que afinar mucho la vista. El diseño es prácticamente idéntico al del modelo anterior, aunque Apple ha logrado colar una pantalla ligeramente más grande de 11 pulgadas (frente a las 10.9 anteriores) ajustando los marcos. Un cambio tan sutil que probablemente notes más al leer las especificaciones que al usarlo.
Donde sí se nota el cambio es por dentro. Apple ha dado un salto de dos generaciones en el procesador, pasando del venerable A14 Bionic al mucho más potente A16 Bionic. Esto no es un mero cambio de número; se traduce en un rendimiento notablemente superior para multitarea, juegos y cualquier aplicación exigente. La otra gran victoria está en el almacenamiento: se acabó empezar con 64 GB justitos. Ahora la base son 128 GB, y además hay opciones de 256 GB e incluso 512 GB para los que lo necesiten todo a mano.
Lo que se queda igual (y lo que se queda fuera)
El resto de la ficha técnica es la conocida y generalmente satisfactoria receta de Apple: misma pantalla Liquid Retina de calidad, mismas cámaras de 12 MP (trasera y frontal ultra gran angular), misma batería que promete un día de uso y el práctico Touch ID en el botón superior.
Eso sí, hay una exclusión que duele: este iPad no será compatible con Apple Intelligence, las funciones de IA que llegarán más adelante a los modelos con chip M1 o superior. Parece que por muy A16 que sea, se ha quedado a las puertas del club de la inteligencia artificial. Una decisión que sin duda busca diferenciar las gamas y que deja claro que este es el iPad «para lo esencial».
El gran titular: el precio (y su pequeña letra)
Aquí es donde Apple ha sorprendido a todos. El iPad (2025) con 128 GB y Wi-Fi tiene un precio de partida de 399 euros. Para ponerlo en contexto, su predecesor se lanzó en 2022 a 579 euros (con solo 64 GB). Es una reducción de precio muy significativa que lo coloca en un terreno tremendamente competitivo.
Pero, como en los menús de los restaurantes finos, la guinda es lo que encarece el plato. Si quieres conectividad celular (5G), prepárate para pagar un suplemento de 170 euros extra, llevando el modelo base con LTE a los 569 euros. La decisión entre Wi-Fi o datos móviles nunca había sido tan cara literalmente.
| Capacidad | Wi-Fi | Wi-Fi + Cellular |
|---|---|---|
| 128 GB | 399 € | 569 € |
| 256 GB | 529 € | 699 € |
| 512 GB | 779 € | 949 € |
¿Para quién es este iPad (2025)?
Este nuevo modelo dibuja su público objetivo con mucha claridad:
- Estudiantes o primeros compradores: La combinación de precio ajustado, rendimiento más que decente con el A16 y 128 GB de base es irresistible para tomar apuntes, navegar y consumir contenido.
- Usuarios que actualizan desde un iPad antiguo: Si tienes un modelo de hace 4 o 5 años, el salto en velocidad y fluidez será abismal.
- Quienes buscan un «segundo pantalla» o dispositivo para el sofá: Su precio lo convierte en una opción excelente para tareas ligeras sin gastar una fortuna.
Eso sí, si tus planes incluyen edición de video profesional, usar apps de IA avanzadas o quieres estar en la vanguardia del software de Apple durante muchos años, quizás debas mirar hacia los iPad Air o Pro. Este es el rey del «suficiente para casi todo».
Disponibilidad y colores
El iPad (2025) ya está disponible para reserva y comenzará a llegar a las tiendas a partir del 12 de marzo. Podrás elegirlo en los clásicos y alegres colores de la gama básica: Azul, Rosa, Amarillo y Plata. Un toque de personalidad sin complicaciones, como el propio dispositivo.
En resumen, Apple ha hecho los deberes con este iPad. No reinventa la rueda, pero la ha hecho más rápida, con más maletero y, sorprendentemente, más barata. En un mercado donde los precios suelen solo subir, este movimiento se agradece. Es la prueba de que a veces, la evolución sensata es más inteligente que la revolución forzada.



